¡Que vivan las noches de amor!
Me encanta ver la tele. Me entretiene y me interesa. Ahora mismo con eso de que estoy «desocupada» he vuelto a consumir televisión por un tubo. La enchufo y ahí la dejo de fondo mientras me dedico a otros menesteres.Ya no sólo me dedico a ver series norteamericas. Veo mucha tele nacional, y en consecuencia mucho corazón y sucesos.Y me estoy quedando flipada. Así que animada por el apoyo de mis más cercanas y cercanos me he decidido a convertirme en cronista televisiva. Creo que me será además muy útil para exorcizar algún demonio personal como verme en el paro sin comerlo ni beberlo y sobrellevar la abrumante responsabilidad de terminar mi tesis.
Me alucina la misoginía que destilan un buen número de programas del corazón. Ésta va desde el terrorismo de género de ‘Corazón corazón’ (otro día el porqué) hasta la misoginia folclórica del ‘Salvame’. ‘Sálvame’ programa que roza lo absurdo, lo subrealista, lo insultante, la manipulación es el que más interés me despierta. Lo primero por su espectacular audiencia, y lo segundo por su relevancia en crear opinión y estados de ánimo. Además de su capacidad para crear, manipular y destruir historias.
Pensaba empezar con la entrevista a Romina, pero actualidad manda y obliga a hablar de la relación entre Bárbara Rey y Chelo García Cortés. Tras semanas de especulaciones, las dos amigas se hna visto las caras en el Deluxe. Así tal cual, pantalla partida en dos en sendos planos de la vedette (estupenda palabra) y la periodista. Una emocionada Bárbara Rey le rechiminaba a su amiga no haberle consultado el momento de desvelar un secreto que ambas habían jurado preservar. Lejos de los rencores, agradecía que ninguno de sus padres estubiera vivo para escuchar la confesión y no avergonzarse. Es curioso ver cómo una mujer que siempre se ha puesto el mundo por montera y ha confesado horrible maltrato de manos del difunto domador tenga ese pudor fruto de la interiorización de los mandatos patriarcales.
El abrazo entre ambas tras confesar la existencia de una noche de amor pasará a los anales de la televisión. Otra cosa será ya lo que digan esta semana de ellas. Seguro que muchas mujeres se sintieron identificadas con ellas…
¡Que vivan las noches de amor!
Bárbara y Chelo: que vivan las noches de amor
Nena, bienvenido sea tu blogggggg. Me encanta, así no echo tanto de menos nuestras conversaciones matutinas robadas al insistente teléfono…Y en la foto estás divina,toda una princesa proletaria.
Yo viví en directo el momento Bárbara-Chelo. Totalmente de acuerdo en que parecía que estaban confesando un crimen y que la lesbofobia más rancia inunda las pantallas. Pero cómo la gocé!!!!! Y Bárbara es toda una embaucadora mediática, qué desaprovechada está y qué jodidamente lista es.
Muuuuuuaaaaaaks preciosa!!!!
Amoooooorrrrrr!!!
Gracias por la difusión!!! Ahora ya nos podemos parafrasear ambas
Un mordisco
Por alusiones (siempre quise decir esto y «te dije que no me llamaras aquí»), aprovecho este espacio para apoyar a la maravillosa María Castejón y su estupendo blog. Ambas compartimos paro, esa enfermedad que llaman tesis y un irremediable amor por el cine, además de casi nombre. Te seguiré siguiendo!!!
En cuanto a ti, mi querida miga Itzi. A ver si alguna vez me dedicas unas líneas sin relacionarme con la Castejón que, aunque ella se lo merece todo, yo me pongo celosa y es malo para el hígado.
Os quiero a ambas y os beso.
Guau. La carne de gallina amada casi tocaya.
espero estar a la altura de tus ojos!!!
yo también os quiero a ambas y secundo tu moción a la Itzi. me imagino a Itzi con la teta fuera en estas gélidas tardes….
Mua!!!!